A diferencia de otras, la Semana Santa Leonesa busca representar la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo desde la austeridad, religiosidad y el sentimiento que a lo largo de los siglos ha marcado tradiciones y costumbres, haciéndonos alcanzar el título de interés turístico internacional.
Debemos luchar por mantener nuestras tradiciones y costumbres. La Semana Santa Leonesa se abastece de ellas y, si bien existe una evolución con los tiempos, nuestra mayor riqueza es mantenerlas y también recuperarlas.
El sentimiento que nos mueve a la mayoría es una mezcla de vivencias que nos inundan: hermanamiento, devoción y momentos compartidos.
Las normas de comportamiento han de ser:
Silencio. Nuestra Semana Santa es austera. No se debe aplaudir a lo largo de las procesiones. Un paso bien pujado se mece, debe parecer que las tallas caminan.
Orden. No se debe cruzar por el medio de una procesión. Ésta empieza con la Cruz de Guía y termina cuando pasan los representantes de las distintas cofradías y hermandades.
Penitencia. Los papones están durante horas, y a veces descalzos, realizando un gran esfuerzo y sacrificio. Entiende que quien tira botellas la noche antes o interrumpe su penitencia causa un gran mal a todos.
Respeto. Quien procesiona tiene derecho a expresar sus ideas y a ser respetado.
Opinión. Poner en la calle una procesión exige gran esfuerzo. Piénsalo antes de criticar y si lo haces que sea de forma constructiva.
Si cumples estas sencillas normas, serás todo un papón y tendremos el honor de considerarte como tal. En nombre de la Junta Mayor Pro-fomento de la Semana Santa de León, Muchas Gracias y que sea Enhorabuena.